El principio de sincronicidad es una ley acausal que nos permite ver la esencia de la naturaleza de un momento concreto. No es la lógica secuencial causa-efecto la que actúa sino la simultaneidad, la coincidencia de dos hechos que, aparentemente, no están conectados.
Comprender el significado y el sentido profundo de un sincronismo nos permite dar un salto cuántico: un paso inesperado y sorprendente.
Presta atención a esas sincronicidades que la mayoría de las veces pasan desapercibidos y no las apreciamos; son un guiño del universo.
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