El amor tiene que fluir porque es como el agua, como el aire, como la electricidad. Puedes embalsar el agua, cerrar puertas y ventanas y no ventilar un cuarto, y apagar la luz y que no haya corriente eléctrica; es el libre albedrío, hacer lo que uno quiera, es tu derecho en la vida. Pero para crecer, avanzar, vivir con plenitud y encontrar sentido a la vida hay que amar, porque amando el alma fluye como el agua de un río que baja de la montaña y sigue su curso camino del océano; como el aire que respiramos que puede ser brisa y viento, que mueve las nubes y las dunas cambiando y transformado cualquier elemento; como los electrones que recorren los cables que conectan y enchufan los aparatos eléctricos para funcionar, y ser lo que un día solo fue un sueño de un inventor que creyó en su invento.
Foto Instagram @artbysayantani
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