Cuando de repente nos acordamos de alguien sin motivo aparente, de un amigo, un compañero o familiar; si te llega su recuerdo como un flash rápido, si se acompaña de emoción como si lo vieras o estuvieras a su lado, si te para unos instantes, si se cuela en tus pensamientos y sientes su energía en tu corazón, eso no es casualidad, azar, cosa rara, a qué vendrá acordarme ahora… eso forma parte de la conexión, los lazos que nos unen que transmiten su energía, su amor. Quizá pensaba en nosotros, recordaba algún momento vivido en nuestra compañía, o sentía la necesidad de contarnos algo, o de vernos, o escucharnos.
Contacta con esa persona que viene al recuerdo y te sorprenderá porque nada es casualidad.
Foto Instagram @nathanprostamo