Siempre que tengas algún malentendido, disgusto o conflicto con otra persona no te quedes con ese pesar, esa ira y ese dolor porque sólo conseguirás hacerte daño a ti mismo, soluciónalo dialogando, es el mejor camino. Un diálogo sereno, sincero, con empatía aclarando todos los pormenores evitará que las emociones negativas se enquisten.
Y en el caso de que la otra persona no se ofrezca al diálogo haz una visualización en la que te imaginas que la tienes delante y le dices todo lo que desees, si sientes rabia exprésala, libérate y aunque no llegues a entender los motivos del conflicto trata de pasar página, olvidar el incidente y perdonar es la única forma de que recuperes la paz interior evitando enredarte y quedarte atrapado en pensamientos reiterativos y emociones negativas.