top of page

Virtudes, nada de defectos...


Cada persona es singular, tiene unas aptitudes, cualidades, dones y virtudes diferentes a las demás, todo ello es único y particular,

son características de la personalidad

que hace que cada ser humano sea exclusivo de verdad

en forma física, energética y espiritual.

Esas virtudes ayudan a caminar, a crecer y a evolucionar,

son nuestros apoyos en la vida, son nuestro guía para prosperar

en esa tarea tan particular.

Cada uno tiene unas virtudes que le acompañan por donde va,

que favorecen el desarrollo de la persona,

siendo su punto fuerte para avanzar.

A veces nos confundimos porque la mente nos hace pensar

que las virtudes son defectos y que nos impiden caminar

creándonos barreras que no nos atrevemos a derribar.

Y todo por pensar que una virtud no vale o que no sirve para evolucionar.

El ser humano no tiene defectos, todas sus cualidades son extraordinarias, todas ayudan y sirven para el objetivo de la vida que no es otro que amar, aprender y evolucionar.

No veas defectos, es sólo un poco de oscuridad sobre tus virtudes,

dale luz y se iluminarán brillando como estrellas en una noche de luna nueva que al día siguiente crecerá y crecerá hasta la luna llena formar, iluminando el cielo, la tierra y el mar.

No veas defectos en tu caminar,

son las virtudes que van a arreglar el camino para avanzar

y a tu destino llegar.

No veas defectos porque eres un alma en un cuerpo

y el alma es perfecto

aunque a veces los condicionamientos te hagan ver imperfecto

lo que siempre es perfecto

con diferencias y peculiaridades

que nada tienen que ver con defectos.

Sólo tienes virtudes, olvídate de defectos.

 

bottom of page